En la colina de Montevecchia, en Alta Brianza, al norte de Milán, una antigua granja del siglo XIX ha sido renovada en su aspecto y su uso previsto. El proyecto, a cargo del estudio A25 architetti supuso la transformación de un espacio de tres habitaciones contiguas en una unidad residencial gracias al uso de pavimentos cerámicos que redefinieron los espacios manteniendo la identidad original.
Las elecciones de diseño han sido dictadas por el territorio y el paisaje rural circundante y los materiales elegidos, como la piedra y la madera, mejoran fuertemente este vínculo.
Para los pavimentos de la planta baja, que alberga la entrada, la cocina y la sala de estar en una parte ligeramente más alta, se ha utilizado la colección Yosemite en la variante Rock, una serie con efecto piedra que reúne una cuidada selección de placas de piedra caliza que aportan una profunda naturalidad impresa en el elemento mineral, a través de sus más bellos matices y vetas. Los acabados y el gran formato de 90×90 cm acentúan aún más su atractivo y predisposición hacia una concepción moderna y versátil del espacio.
Un proyecto, por tanto, aprovechado al máximo en cuanto a material y espacio, que ha transformado una antigua edificación utilizada como espacio de trabajo en una vivienda contemporánea con una marcada y elegante personalidad.